¡¡¡Hola amigos de dos patas!!!
Hoy quiero hablaros de un tema que se puso de moda hace tiempo y que aún hoy he visto que hay gente que lo usa de forma habitual con sus perros, y lo que es peor, ¡Hay profesionales que lo recomiendan! Para los que no estéis familiarizados con el término, un “Alpha Roll” es cuando forzáis físicamente a vuestro perro a poner su espalda contra el suelo, exponiendo sus partes blandas y mantenerle es esa posición hasta que se “relaje” demostrando así que vosotros sois los dominantes.
Esta técnica va íntimamente unida a la teoría de la dominancia que se originó en los años 40 en un estudio científico acerca del comportamiento de varias manadas de lobos en cautividad.
Estos estudios adolecían de varios errores siendo los dos siguientes los más graves:
- El más evidente: El estudio se hizo con manadas de lobos en cautividad. No es difícil darse cuenta que ninguna especie se comporta de igual modo en libertad que en cautividad. Es fácil entender como los niveles de estrés son más elevados y aumenta la depresión al estar en cautividad.
- Menos evidente pero más grave: Las manadas de lobos no eran naturales, habían sido creadas de forma artificial ya que dichos lobos habían sido capturados de diferentes manadas. Esto creó grupos sociales inestables propensos a las peleas.
Como es lógico, el comportamiento de dichas manadas era completamente distinto del comportamiento de los lobos en libertad.
Pero para no desviarnos del tema, los defensores del “Alpha Roll” dicen que hay que usarlo para demostrar al perro que somos nosotros los que mandamos, que somos el “Alfa” de la manada, y que hay que colocar en dicha posición al animal hasta que se “relaje” y si el perro se hace pis, les he oído decir que eso es bueno porque nos muestra sumisión.
En la naturaleza, si que es cierto que existe este comportamiento, o… más o menos.
En primer lugar, y de nuevo en lobos, se produce ese comportamiento… pero al revés: es totalmente voluntario y el que lo hace es el lobo para demostrar sumisión a otro lobo. No es una conducta forzada sino totalmente voluntaria.
¿Y los perros? Los perros también realizamos esta conducta comunicando al otro perro que no queremos problemas, que no somos una amenaza y que tenemos intenciones pacíficas. Tenemos que darnos cuenta que al colocarnos boca arriba, estamos presentando las partes blandas más vulnerables al otro animal, lo que es un riesgo para nuestra vida.
Entonces ¿Por qué no hacerlo si los perros y los lobos nos colocamos en esa posición? ¿No nos estáis diciendo que debemos ser sumisos?
Lo de la sumisión y dominancia es un tema muy largo que prometo tratar otro día.
En la naturaleza, si en una pelea, un animal consigue poner a otro en esa posición, lo siguiente que hará será morder las partes blandas matando así al otro animal.
Al hacer esto con vuestro perro, lo que estáis haciendo es que pueda pensar precisamente eso, por lo que en un primer momento luchará por su vida hasta que considere que no puede hacer nada y se resigne a morir. Cuando hace sus necesidades encima, no es por sumisión, es porque ha perdido el control de sus esfínteres debido al miedo.
Evidentemente esta no es la manera de educar a ningún animal. Lo que conseguís con esta técnica es que el perro sea más inseguro, que os tenga miedo, seguramente le causareis un trauma y más que dar un mensaje que sois el “líder alfa”, lo que seréis a los ojos de vuestra mascota es un perturbado del que no se puede confiar. Imaginate que discutes con tu jefe y este, para demostrar que es él el que manda, te tira al suelo y te pone una pistola en la cabeza. ¿Piensas realmente que es un líder o un loco del que es mejor no acercarse?
Ok, ya sabéis por qué no hay que hacerlo, pero ¿y si es el perro es que se pone en esa posición cuando jugáis? ¿qué tenéis que hacer para que se sienta seguro?
Si vuestro amigo se coloca voluntariamente boca arriba cuando jugáis o estáis interactuando con él de una forma lúdica, podéis acariciarle la barriga todo lo que queráis. Vuestro amigo de cuatro patas os está diciendo que sois de total confianza para él y os estamos pidiendo que nos rasquéis la barriga. No os tenéis que preocupar, al revés debéis estar tranquilos y orgullosos de que confiemos tanto en vosotros para mostrar esa conducta.
De todos modos, es muy importante que esa confianza se mantenga y que el perro siempre, pero que siempre, siempre, pueda abandonar esa posición a voluntad. Así esa confianza se mantendrá e incluso aumentará, dándonos un plus de felicidad.
Y sin más, me despido.
¡¡¡Lametones a todos!!!
